Cuando suena el himno de este país es que como si una cucaracha o un grillo me despierte de una pesadilla ancestral, no remito a Atapuerca ni a esos homínidos que más de uno desearan fuesen españoles.
Todo lo que huele a españolistos se concibe rancio, retrógado, ni siquiera el fútbol o los deportistas en general, ha conseguido erradicar, al menos en mi educación sentimental, lo fantasmagórico del carácter peninsular, si fuera una Iberia federal pues tendría un pase, pero visto la exhibition, los sabotajes de los puros de espíritu a los símbolos de la otra España tricolor, y el especial afán por refrendar este sistema, no deja duda ante el camino a seguir.
Recuerdo un grupo punk vasco Eskorbuto en un tema que decía Maldito país España...Qué triste con la que está cayendo, tanta ceremonía, tanta alaracas, a ver si Chile elimina a la selección y por lo menos se recicla el sistema de juego, que ya es muy previsible y encima se lo llevan demasiado calentito, qué vergüenza de ingresos; deberían tener la decencia de ceder al menso el 80% para esas familias sin recursos. Basta ya del paraiso fiscal futbolístico. Lamentable.
miércoles, 18 de junio de 2014
miércoles, 4 de junio de 2014
De qué hablamos cuando de poesía no leemos(sabemos)
La poesía no se aprende, se siente, siempre que se valore la lectura, aficionarse a leer cualquier folleto, propaganda, pasquín, publicidad de cagafú, metadona o cortoinglés, da igual, no importa hasta el marca vale. Se empieza por ahí, por creer que la lectura no es una pérdida de tiempo, si acaso me tomo mi tiempo que estoy terriblemente aburrido y me tumbo y leo algo; entonces alguién o algo me acerca a la poesía, porque ella no te llamará, tendrás tú lector ser paciente para afirmar que el juego de las palabras, los sentimientos-pensamientos pueden ofrecerte un placer anodino, inconcebible hasta ahora, que me creía que todo era prosa artesanal de historias y tramas de albañil meticuloso, pues no, también existe la diversión o sufrimiento armado, da lo mismo, cuando el artífice que hila versos al albur se siente mágico transmitiendo(se) sensaciones que trascienden el hecho mismo de escribir(leer) poemas; puesto que la inspiración no existe y las musas están en la cola del paro, y los faros o torretas exclusivas no alcanzan al público, sea el milagro de sentir el ritmo interno del lenguaje y los desarreglos, las disonancias reflejan los temores, las disarmonías asustan y nos hacen dudar de nuestra posición; en poesía provocar no es ya un lema es casi un dogma, por aquello de a la inmensa minoría, hecho ya retrógado a esta altura (jartura) de poetas oscuros-que no poemas- que se creen exquisitos y solo se dirigen a sus coleguitas, iniciados en la secta y gestionan sus papeles como si fueran manuscritos del mar muerto: esta metáfora misma los retratan, un mar volátil que los hace flotar sin tentar el fondo abisal donde surgen las alimañas extrañas a la luz. Poetizar es pensar sin prejucios, atreverse, arriesgarse, liberarse de la regla, si tengo que sangrar, sangremos, comparto mi malestar pero si te jodo que sepas, te lo repito, que sepas que es por mejorar todos, si me vacio es por rellenar la distancia que nos separa. El proceso poético se adentra entonces en la penumbra, ese espacio que está por alumbrar, si se quiere claro, pues el poeta no entiende de obligaciones, no necesita aclararse, va por libre, ya lo situará el lector siempre que quiera compartir lo que hace: he aquí el dilema en poesía: publicarse para qué.
Educar en poesía si, pero formar no.
Educar en poesía si, pero formar no.
martes, 3 de junio de 2014
TRABAJO PELÍCULA: 8 APELLIDOS VASCOS
Apartados
- Resumen en una carilla.
- Descripción de escenas que te hayan interesado. Explica porqué.
- Señala la idea principal de la trama (argumento).
- Investiga sobre los tópicos o estereotipos que retratan en la película.
- cómo se exajera: formas de hablar, actuar...
- icónos, imágenes que denotan tradiciones de un pueblo o cultura.
- prejuicios, malentendidos sobre el carácter de los sevillanos(andaluces) y las vascas.
- el amor: fuerza irresistible que concilian los contrarios
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